Herida facial por arma de fuego: presentación de un casoFacial wound caused by firearm: A case psresentation
Abstract:

Se presenta un caso de un niño yemenita de 6 años de edad del poblado de Maabar que fue atendido por el equipo interdisciplinario de profesores cubanos del Hospital Al Waheda perteneciente a la Universidad de Thamar, el cual recibió una herida maxilofacial por proyectil de arma de fuego, que le ocasionó gran destrucción de los tejidos de la región nasal, zona por donde salió el proyectil. Se expone en el trabajo cómo se le salvó la vida a este niño y se reconstruyó el defecto facial gracias a la ardua labor de los profesores cubanos, que devolvieron a este niño a la sociedad con vida, con una excelente rehabilitación estética y funcional, demostrando una vez mas la humana labor de la medicina cubana en países hermanos.

The case of a Yemenite child aged 6 with a maxillofacial wound caused by firearm involving destruction of nasal area tissues, oulet point of projectile, he is resident of Maabar built-up area is presented, who was cared by interdisciplinary staff of Cuban professors of Al Waheda Hospital of Thamar University. In present paper is showed the way how his life was saved, and facial defect was reconstructed thanks to arduous work of Cuban professors, who returned this child alive to society with an excellent cosmetic and functional rehabilitation, showing once again the human work of Cuban medicine in brother countries.

Keywords:
    • HERIDAS POR ARMA DE FUEGO;
    • HUESO NASAL;
    • FRACTURAS CRANEALES;
    • FRACTURAS CRANEALES;
    • TRAUMATISMOS FACIALES;
    • TRAUMATISMOS FACIALES;
    • FISTULA DE LAS GLANDULAS SALIVALES;
    • Firearm wounds;
    • nasal bone;
    • cranial fractures;
    • cranial fractures;
    • facial trauma.
<h3 align="left">Presentaci&oacute;n de casos </h3> <p align="left">Al Waehda University Hospital, Maabar Rep&uacute;blica de Yemen </p> <h2 align="left">Herida facial por arma de fuego: presentaci&oacute;n de un caso </h2> <p align="left"><a href="#autor">Dr. Juan Carlos Quintana D&iacute;az,<span class="superscript">1</span> Dr.Abdulsalam Ali Zwiad,<span class="superscript">2</span> Dra. Sarah L&oacute;pez Lazo,<span class="superscript">3</span> Dr. Sergio Vega Basulto,<span class="superscript">4</span> Dr. Rafael Pinilla Gonz&aacute;lez<span class="superscript">5</span> y Dr. Zayed Hussein<span class="superscript">6</span></a><span class="superscript"><a name="cargo" id="cargo"></a></span> </p> <h4 align="left">Resumen </h4> <p align="left">Se presenta un caso de un ni&ntilde;o yemenita de 6 a&ntilde;os de edad del poblado de Maabar que fue atendido por el equipo interdisciplinario de profesores cubanos del Hospital Al Waheda perteneciente a la Universidad de Thamar, el cual recibi&oacute; una herida maxilofacial por proyectil de arma de fuego, que le ocasion&oacute; gran destrucci&oacute;n de los tejidos de la regi&oacute;n nasal, zona por donde sali&oacute; el proyectil. Se expone en el trabajo c&oacute;mo se le salv&oacute; la vida a este ni&ntilde;o y se reconstruy&oacute; el defecto facial gracias a la ardua labor de los profesores cubanos, que devolvieron a este ni&ntilde;o a la sociedad con vida, con una excelente rehabilitaci&oacute;n est&eacute;tica y funcional, demostrando una vez mas la humana labor de la medicina cubana en pa&iacute;ses hermanos. </p> <p align="left"><em>Palabras clave: </em>HERIDAS POR ARMA DE FUEGO/cirug&iacute;a; &nbsp; HUESO NASAL/lesiones; FRACTURAS CRANEALES/etiolog&iacute;a; FRACTURAS CRANEALES/cirug&iacute;a; TRAUMATISMOS FACIALES/etiolog&iacute;a; TRAUMATISMOS FACIALES/cirug&iacute;a; FISTULA DE LAS GLANDULAS SALIVALES/cirug&iacute;a; </p> <p align="left">&nbsp;</p> <p align="left">Los traumatismos y fracturas maxilofaciales, a pesar que en muchas ocasiones no comprometen la vida del paciente, ocasionan deformidades dif&iacute;ciles de ocultar por ser la porci&oacute;n mas visible del cuerpo.<span class="superscript">1-4</span> Estas eventualidades, cuando se produce en ni&ntilde;os, adquieren una mayor peligrosidad, pues independientemente de los defectos antiest&eacute;ticos, pueden aparecer desequilibrios electrol&iacute;ticos y hemodin&aacute;micas, a diferencia de los adultos, &nbsp; y requieren de un tratamiento de emergencia altamente eficaz.<span class="superscript">4-7</span> </p> <p align="left">Los traumatismos faciales en los ni&ntilde;os, muchas veces afectan los centros de crecimiento y desarrollo de la cara, que pueden dar lugar a defectos funcionales y est&eacute;ticos en el adulto como hipoplasias, atrofias y desarmon&iacute;as faciales, lo cual se acompa&ntilde;a frecuentemente de otros tipos de fracturas: craneales, de miembros, etc.<span class="superscript">2,7</span> Por esta raz&oacute;n, se debe actuar con gran seguridad profesional ante estas emergencias, e incluso requieren de la participaci&oacute;n de un equipo interdisciplinario formado por m&aacute;xilofaciales, anestesi&oacute;logos, neurocirujanos, cirujanos generales, ortop&eacute;dicos, fisioterapeutas, etc. </p> <p align="left">Las heridas maxilofaciales por arma de fuego en tiempo de paz, a pesar de que no son frecuentes, ocasionan grandes traumas que pueden comprometer la vida del paciente y dejar irreparables secuelas.<span class="superscript">8-12</span> De ah&iacute; la importancia de este trabajo, donde se describe la labor de la Brigada M&eacute;dica de profesores cubanos en el Hospital Al-Waheda de Maabar, perteneciente a la Universidad de Thamar, Rep&uacute;blica de Yemen, en la atenci&oacute;n de un ni&ntilde;o de 6 a&ntilde;os que recibi&oacute; en su casa una herida maxilofacial por arma de fuego. </p> <h4 align="left">Presentaci&Oacute;n del caso </h4> <p align="left"><strong> </strong>Paciente A.M. de 6 a&ntilde;os de edad que llega al Cuerpo de Guardia despu&eacute;s de recibir una herida maxilofacial de arma de fuego causada por un proyectil de 3 cm (fig. 1) en su casa, jugando con su hermano. El paciente fue atendido por el equipo de colaboradores cubanos de forma inmediata, y una vez que mejor&oacute; su estado general y se realizaron los estudios cl&iacute;nicos radiogr&aacute;ficos y los complementarios necesarios, se llev&oacute; al sal&oacute;n de operaciones. </p> <p align="left">El orificio de entrada del proyectil fue por la porci&oacute;n parot&iacute;dea y maset&eacute;rica derecha, atraves&oacute; tejidos blandos faciales (fig. 2) y sali&oacute; por la regi&oacute;n nasal, ocasionando fractura nasal y destrucci&oacute;n de piel y cart&iacute;lagos (fig. 3). </p> <p align="center"><a href="/img/revistas/est/v44n2/f0107207.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f0107207.jpg" width="196" height="217" border="0" /></a></p> <p align="center">Fig. 1. Proyectil de 3 cm de largo. </p> <p align="center"><a href="/img/revistas/est/v44n2/f0207207.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f0207207.jpg" width="358" height="209" border="0" /></a></p> <p align="center">Fig. 2. Orificio de entrada. </p> <p align="center"><a href="f0307207.jpg"></a><a href="/img/revistas/est/v44n2/f0307207.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f0307207.jpg" width="353" height="264" border="0" /></a></p> <p align="center">Fig. 3. Orificio de salida. </p> <h6 align="left">Proceder </h6> <p align="left">El paciente fue llevado al sal&oacute;n de operaciones y bajo anestesia general con intubaci&oacute;n orotraqueal y colocaci&oacute;n de tapones intraorales, se realiz&oacute; una esmerada <em>toilette </em> de las heridas, se redujo la fractura nasal, y se realiz&oacute; una reconstrucci&oacute;n est&eacute;tica y funcional de la nariz (mucosa, huesos, cart&iacute;lago y piel). Despu&eacute;s del posoperatorio y con una recuperaci&oacute;n r&aacute;pida y sin complicaciones, el paciente ingres&oacute; en la Sala de Terapia Intensiva (fig. 4). </p> <p align="center"><a href="/img/revistas/est/v44n2/f0407207.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f0407207.jpg" width="160" height="120" border="0" /></a></p> <p align="center">Fig. 4. Paciente una vez terminada la operaci&oacute;n. </p> <p align="left">A las 72 horas se le retir&oacute; el tap&oacute;n nasal y se indicaron gotas nasales de Efedrina. Posteriormente, a los 15 d&iacute;as, se llev&oacute; de nuevo al sal&oacute;n de operaciones bajo anestesia general endotraqueal para realizar cierre y plastia de una peque&ntilde;a f&iacute;stula salivar que qued&oacute; en la zona del orificio de entrada. Se retir&oacute; la sutura nasal y la f&eacute;rula en el propio acto quir&uacute;rgico aprovechando la posibilidad de la anestesia general; se observ&oacute; una buena cicatrizaci&oacute;n y la nariz sim&eacute;trica, a pesar de haber sido el tratamiento de emergencia. </p> <h4 align="left">Discusi&Oacute;n </h4> <p align="left">Las heridas de arma de fuego ocasionan graves traumas faciales que comprometen en muchas ocasiones la vida del paciente,<span class="superscript">8-12</span> y constituyen un reto para el cirujano maxilofacial.<span class="superscript">9-11</span> </p> <p align="left">La r&aacute;pida ejecuci&oacute;n de todas las medidas en casos de emergencia llevadas a cabo en este paciente, entre ellas, evitar el <em>shock </em>, el compromiso respiratorio y un diagn&oacute;stico cl&iacute;nico radiogr&aacute;fico r&aacute;pido y certero, permiti&oacute; llevar al ni&ntilde;o en buenas condiciones al sal&oacute;n de operaciones, que es el requisito fundamental para poder realizar el tratamiento quir&uacute;rgico de las lesiones, que en este caso fue el definitivo, ya que se logr&oacute; una excelente reconstrucci&oacute;n de los huesos nasales y de la anatom&iacute;a tanto interna como externa de la nariz (figs. 5-7). El paciente y sus familiares quedaron muy agradecidos de la r&aacute;pida y eficaz acci&oacute;n de nuestra brigada, y una vez m&aacute;s se pone de manifiesto la humana y profesional labor de los m&eacute;dicos cubanos en cualquier parte del mundo, y demostr&oacute; adem&aacute;s la importancia del equipo interdisciplinario compuesto por maxilofacial, anestesi&oacute;logo, cirujano general y neurocirujano. </p> <p align="center"><a href="/img/revistas/est/v44n2/f0507207.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f0507207.jpg" width="306" height="229" border="0" /></a></p> <p align="center">Fig. 5. Rayos X preoperatorio. </p> <p align="center"><a href="/img/revistas/est/v44n2/f0607207.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f0607207.jpg" width="299" height="223" border="0" /></a></p> <p align="center">Fig. 6. Rayos X posoperatorio. </p> <p align="center"><a href="/img/revistas/est/v44n2/f0707207.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f0707207.jpg" width="256" height="227" border="0" /></a></p> <p align="center"><a href="/img/revistas/est/v44n2/f707207a.jpg"><img src="/img/revistas/est/v44n2/f707207a.jpg" width="263" height="233" border="0" /></a></p> <p align="center">Fig. 7. Comparaci&oacute;n del paciente antes y despu&eacute;s de operado. </p> <h4 align="left">Summary</h4> <p><strong>Facial wound caused by firearm: A case psresentation</strong></p> <p> The case of a Yemenite child aged 6 with a maxillofacial wound caused by firearm involving destruction of nasal area tissues, oulet point of projectile, he is resident of Maabar&nbsp;built-up area is presented, who was cared by interdisciplinary staff of Cuban professors of Al Waheda Hospital of Thamar University. In present paper is showed the way how his life was saved, and facial defect was reconstructed thanks to arduous work of Cuban professors, who returned this child alive to society with an excellent cosmetic and functional rehabilitation, showing once again the&nbsp;&nbsp; human work of Cuban medicine in brother countries.</p> <p><em>Key words:</em> Firearm wounds/surgery; nasal bone/lesions; cranial fractures/etiology, cranial fractures/surgery; facial trauma&nbsp; </p> <p align="left">&nbsp;</p> <div align="left"> <h4>Referencias bibliogr&Aacute;ficas </h4> </div> <!-- ref --><p> 1. Spina A, Moriciani R. Mandibular fracture. En: Fonseca R. Oral and Maxillofacial Surgery. Vol. 3. Philadelphia: WB Saunders; 2000. pp. 85-135. <!-- ref --><p> 2. Sheperd JP. Maxillofacial trauma. En: Pedlar J, Frame JW. Oral and Maxillofacial Surgery. London: Harcourt Health Sciences; 2001. pp. 179-94. <!-- ref --><p> 3. Iida S, Mtsuya T. Pediatric maxillofacial fracture: Their aetiological characters and fractures patterns. J Craneomaxillofac Surg 2002;30(4):237-41. <!-- ref --><p> 4. Osmond NH, Breannan-Barnes M, Shepard AL. A four year review of severe pediatric trauma in Ontario. A descriptive analysis. J Trauma 2002;52:8-12. <!-- ref --><p> 5. Mukhida K, Sharma MR, Shilpakar S. Pediatric neurotrauma in Kathmandu, Nepal: Implication for injury management and control. Childs New Sist 2006;22:352-62. <!-- ref --><p> 6. Fingerhut LA, Christofell KK. Firearm related death and injury among children and adlescents. Future Child 2002;12:24-12. <!-- ref --><p> 7. Quintana JC, &Aacute;lvarez L, Giralt BM. Traumatismos m&aacute;xilo faciales en ni&ntilde;os. Rev Ciencias Medicas Habana [seriada en l&iacute;nea] <a href="http://www.cpicmah.sld.cu/">www.cpicmah.sld.cu </a> Consultada: 15 de noviembre, 2006. <!-- ref --><p> 8. Motamendi MH. Primary management of maxillofacial hard and soft tissues gun shot and sharpen injuries. J Oral Maxillofac Surg 2003;61(12):1390-8. <!-- ref --><p> 9. Yuksel F, Celikos B, Erquno, Peker F, Alikel C, Ebrins S. Management of maxillofacial problems in self-inflicted rifle wounds. Ann Plast Surg 2004;54(2):111-7. <!-- ref --><p> 10. Viano D. Ballistic impact to the forhead, zygoma and mandible. Comparison of human and frangible. Dumming free biomaterial. J Trauma 2004;56(6):1305-11. <p> 11. Quintana JC. Herida por proyectil de arma de fuego en un ni&ntilde;o. Presentaci&oacute;n de un caso. Rev Cubana Estomatol 2005;42(2) [seriada en l&iacute;nea] <a href="http://www.bvs.sld.cu/">www.bvs.sld.cu </a> Consultado: 18 de noviembre, 2006. </p> <!-- ref --><p> 12. Siberchico TF, Pinsolle J, Mayoufre C, Ballanguer A, Gomez D, Caix P. Gun-shot injuries of the face. Analysis of 165 cases and reevaluation of the primary treatment. Amm Chir Plast Esthet 1998;43(2):132. <p align="left">Recibido: Febrero 2007 &nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp;&nbsp; Aprobado: Marzo 2007 <br /> Dr. <em>Juan Carlos Quintana D&iacute;az</em>. Ave. 41 edificio 73, apto. 13, entre 34 y 40, Artemisa, CP 33800, La Habana, Cuba. e-mail: <a href="mailto:juanc.quintana@infomed.sld.cu">juanc.quintana@infomed.sld.cu </a></p> <p align="left"><span class="superscript"><a href="#CARGO">1</a></span><a href="#CARGO">Especialista de II Grado en Cirug&iacute;a Maxilofacial. Profesor Auxiliar, ISCM-H. <br /> <span class="superscript"><strong>2</strong></span>Decano de la Facultad de Estomatolog&iacute;a Thamar University, Yemen. Profesor Asociado.<br /> <span class="superscript"><strong>3</strong></span>Especialista de II Grado en Anestesiolog&iacute;a y Reanimaci&oacute;n y Especialista de II Grado en Medicina Intensiva y Emergencias. Profesor Auxiliar y Consultante, ISCM-Camag&uuml;ey. <br /> <span class="superscript"><strong>4</strong></span>Especialista de II Grado en Neurocirug&iacute;a y Especialista de II Grado en Medicina Intensiva y Emergencias. Profesor Titular, ISCM-Camag&uuml;ey.<br /> <span class="superscript"><strong>5</strong></span>Especialista de II Grado en Cirug&iacute;a General. Profesor Auxiliar, ISCM-H. <br /> <span class="superscript"><strong>6</strong></span>Estomat&oacute;logo General. Jefe del Departamento de Estomatolog&iacute;a Hospital Maabar.</a><a name="AUTOR" id="AUTOR"></a> </p>

References

  • 1.
    Spina, A
    Moriciani, R.
      Mandibular fracture.
    Fonseca, R.
      Oral and Maxillofacial Surgery. 2000 85-135.Philadelphia WB Saunders
  • 2.
    Sheperd, JP.
      Maxillofacial trauma.
    Pedlar, J
    Frame, JW.
      Oral and Maxillofacial Surgery 2001 . 179-94.London Harcourt Health Sciences
  • 3
    Iida, S
    Mtsuya, T
      Pediatric maxillofacial fracture: Their aetiological characters and fractures patterns J Craneomaxillofac Surg 2002 30 4 4 237-41
  • 4
    Osmond, NH
    Breannan-Barnes, M
    Shepard, AL
      A four year review of severe pediatric trauma in Ontario: A descriptive analysis J Trauma 2002 52 8-12
  • 5
    Mukhida, K
    Sharma, MR
    Shilpakar, S
      Pediatric neurotrauma in Kathmandu, Nepal: Implication for injury management and control Childs New Sist 2006 22 352-62
  • 6
    Fingerhut, LA
    Christofell, KK
      Firearm related death and injury among children and adlescents Future Child 2002 12 24-12
  • 7
    Quintana, JC
    Álvarez, L
    Giralt, BM
      Traumatismos máxilo faciales en niños Rev Ciencias Medicas Habana [seriada en línea]
  • 8
    Motamendi, MH
      Primary management of maxillofacial hard and soft tissues gun shot and sharpen injuries J Oral Maxillofac Surg 2003 61 12 12 1390-8
  • 9
    Yuksel, F
    Celikos, B
    Erquno,
    Peker, F
    Alikel, C
    Ebrins, S
      Management of maxillofacial problems in self-inflicted rifle wounds Ann Plast Surg 2004 54 2 2 111-7
  • 10
    Viano, D
      Ballistic impact to the forhead, zygoma and mandible: Comparison of human and frangible Dumming free biomaterial. J Trauma 2004 56 6 6 1305-11
  • 11
    Quintana, JC
      Herida por proyectil de arma de fuego en un niño: Presentación de un caso Rev Cubana Estomatol 2005 42 2 2 0-0
  • 12
    Siberchico, TF
    Pinsolle, J
    Mayoufre, C
    Ballanguer, A
    Gomez, D
    Caix, P
      Gun-shot injuries of the face: Analysis of 165 cases and reevaluation of the primary treatment Amm Chir Plast Esthet 1998 43 2 2 132
History: