Tumores de glándulas salivales: Su comportamiento en 10 años de trabajo (1993-2002)
Abstract:

Se realizó un estudio descriptivo de 107 pacientes que fueron intervenidos quirúrgicamente debido a afecciones en glándulas salivales, durante un período de 10 años, en el Servicio de Cirugía Maxilofacial del Hospital Provincial Docente "Manuel Ascunce Domenech" de Camagüey, con el propósito de describir su frecuencia según edad y sexo, comportamiento biológico, localización anatómica y resultado histopatológico. Hubo predominio de las condiciones neoplásicas benignas en la parótida, mientras que en la submandibular se manifestaron con mayor frecuencia los procesos malignos. El adenoma pleomorfo fue el tumor más frecuente entre las neoplasias benignas y el carcinoma mucoepidermoide, el más común entre las malignas.

A descriptive study of 107 patients, who had been surgically treated from salivary gland tumors in the Maxillofacial Surgery Department of "Manuel Ascunce Domenech" provincial teaching hospital located in Camagüey during 10 years, was performed to describe the sex and age distribution and frequency of these tumors, their biological behavior, anatomical location and histopathological outcome. It was observed that benign neoplasias predominated in the parotid glands whereas malignant processes developed more often in submandibular glands. Pleomorphic adenoma was the most found tumor among the benign neoplasias and mucoepidermoid carcinoma was the commonest among the malignant processes.

Keywords:
    • tumores;
    • glándulas salivales;
    • epidemiología;
    • cavidad bucal;
    • tumor;
    • salivary glands;
    • epidemilogy;
    • oral cavity.
<h3>Art&iacute;culos Originales</h3> <p>Hospital Clinicoquir&uacute;rgico Docente &quot;Manuel Ascunce Domenech&quot; <br> Camag&uuml;ey</p><h2></h2><h2>Tumores de gl&aacute;ndulas salivales. Su comportamiento en 10 a&ntilde;os de trabajo (1993-2002)</h2> <p> </p> <p><a href="#cargo"> Dr. Oscar Garc&iacute;a-Roco P&eacute;rez <span class="superscript">1 </span></a><span class="superscript"><a name="autor"></a></span></p><h4>Resumen </h4> <p>Se realiz&oacute; un estudio descriptivo de 107 pacientes que fueron intervenidos quir&uacute;rgicamente debido a afecciones en gl&aacute;ndulas salivales, durante un per&iacute;odo de 10 a&ntilde;os, en el Servicio de Cirug&iacute;a Maxilofacial del Hospital Provincial Docente &quot;Manuel Ascunce Domenech&quot; de Camag&uuml;ey, con el prop&oacute;sito de describir su frecuencia seg&uacute;n edad y sexo, comportamiento biol&oacute;gico, localizaci&oacute;n anat&oacute;mica y resultado histopatol&oacute;gico. Hubo predominio de las condiciones neopl&aacute;sicas benignas en la par&oacute;tida, mientras que en la submandibular se manifestaron con mayor frecuencia los procesos malignos. El adenoma pleomorfo fue el tumor m&aacute;s frecuente entre las neoplasias benignas y el carcinoma mucoepidermoide, el m&aacute;s com&uacute;n entre las malignas.</p> <p></p> <p><i>Palabras clave: </i> tumores, gl&aacute;ndulas salivales, epidemiolog&iacute;a, cavidad bucal.</p> <p></p> <p></p> <p>Los tumores de gl&aacute;ndulas salivales son poco frecuentes, pues representan aproximadamente entre el 0,5 y 1 % de todos los tumores. Constituyen el 3 % de las neoplasias que afectan a cabeza y cuello en los adultos, mientras que en la infancia alcanzan alrededor del 8 %. La incidencia actual oscila entre 0,4-3,5 casos/100 000 personas/a&ntilde;o. El 85-95 % de dichos tumores se origina en la par&oacute;tida, la gl&aacute;ndula submaxilar y las gl&aacute;ndulas menores del paladar; el resto se distribuye en el &aacute;mbito de otros tejidos salivales dispersos por la cavidad oral y el aparato respiratorio superior. La mayor parte de las lesiones palpables en las gl&aacute;ndulas salivales mayores (par&oacute;tida, submaxilar o submandibular y sublingual) son de etiolog&iacute;a tumoral; son malignos aproximadamente 1/6 de los de par&oacute;tida, 1/3 de los submandibulares y la mitad de los del paladar.<span class="superscript">1</span>-<span class="superscript">5</span> <br> </p> <p>Realizando una estratificaci&oacute;n m&aacute;s detallada, el 80 % de las lesiones se localizan al nivel parot&iacute;deo (90 % en el l&oacute;bulo superficial, 9 % en el l&oacute;bulo profundo, 1 % en &quot;reloj de arena&quot;); otro 10 % en la gl&aacute;ndula submaxilar, y queda el resto distribuido en varias regiones como el paladar, donde se encuentra la mayor parte de las lesiones que afectan a gl&aacute;ndulas salivales accesorias. </p> <p>Dentro de la patolog&iacute;a tumoral, se aprecia una amplia diversidad de neoplasias, cuya histog&eacute;nesis y variedad de patrones de crecimiento han despertado hoy considerable inter&eacute;s. <br> </p> <p>En la actualidad, el caudal de conocimientos sobre las afecciones de gl&aacute;ndulas salivales se ha enriquecido, y hoy se cuenta con una detallada clasificaci&oacute;n de tumores que abarcan los adenomas, los carcinomas, los tumores no epiteliales, los linfomas malignos, los tumores secundarios, los tumores inclasificados y las lesiones pseudotumorales, todo lo cual facilita el correcto estudio y la terap&eacute;utica de esta amplia diversidad de entidades.<span class="superscript">4 </span> <br> </p> <p>La etiolog&iacute;a de los tumores de gl&aacute;ndulas salivales es multifactorial. Los supervivientes de los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki y aquellos pacientes que recibieron radioterapia como tratamiento de otras lesiones neopl&aacute;sicas, presentan una elevada incidencia, lo cual hace presuponer que la radiaci&oacute;n externa puede constituir un factor predisponente. Asimismo, algunos habitantes de Alaska que ingirieron un elevado porcentaje de grasa en su dieta, presentan mayor n&uacute;mero de estas neoplasias, por lo cual se debiera considerar la dieta como otro posible factor predisponente. Finalmente, la presencia de una inclusi&oacute;n v&iacute;rica de tipo ARN en la secreci&oacute;n h&iacute;stica del adenoma pleomorfo, hace pensar en una posible etiolog&iacute;a v&iacute;rica.<span class="superscript">1</span>,<span class="superscript">5,6</span> <br> </p> <p>La intervenci&oacute;n quir&uacute;rgica contin&uacute;a siendo el m&eacute;todo de elecci&oacute;n para las neoplasias de gl&aacute;ndulas salivales, aunque se han experimentado cambios sustanciales, pues las excisiones limitadas, como la enucleaci&oacute;n, y las exageradamente radicales como la parotidectom&iacute;a radical, han quedado reservadas solo para un peque&ntilde;o grupo de afecciones. En la actualidad se aboga, en la mayor&iacute;a de los casos, por procedimientos m&aacute;s conservadores con respecto a la secci&oacute;n deliberada del nervio facial, pero que ofrezcan un margen de seguridad adecuado, que evite las frecuentes recidivas observadas en pacientes tratados mediante la enucleaci&oacute;n, y en aras tambi&eacute;n de evitar la alta morbilidad que provoca la secci&oacute;n deliberada del nervio facial, en las parotidectom&iacute;as radicales. <span class="superscript">6-10</span> <br> </p> <p>El presente trabajo se realiza con el objetivo de describir la frecuencia y el comportamiento clinicobiol&oacute;gico de las afecciones tumorales de gl&aacute;ndulas salivales tratadas quir&uacute;rgicamente. </p><h4>M&eacute;todos <br> </h4> <p>Se realiz&oacute; un estudio descriptivo de 107 pacientes intervenidos quir&uacute;rgicamente por afecciones tumorales de gl&aacute;ndulas salivales durante un per&iacute;odo de 10 a&ntilde;os, desde 1993 hasta el a&ntilde;o 2002, en el Hospital Provincial Docente &quot;Manuel Ascunce Domenech&quot; de Camag&uuml;ey, los cuales constituyeron el universo de este trabajo. Para realizarlo, nos guiamos estrictamente por la clasificaci&oacute;n de la Organizaci&oacute;n Mundial de la Salud del Dr. <i>Seifert</i>, <span class="superscript">2</span> en la cual aparecen 7 grupos de trabajo que se exponen a continuaci&oacute;n: <br> </p><ul> <li>Grupo I: adenomas. </li> <li>Grupo II: carcinomas. </li> <li>Grupo III: tumores no epiteliales. </li> <li>Grupo IV: linfomas malignos. </li> <li>Grupo V: tumores secundarios. </li> <li>Grupo VI: tumores no clasificados. </li> <li>Grupo VII: lesiones afines. <br> </li> </ul> <p>Los datos primarios se reflejaron en un formulario confeccionado al efecto, donde se recogieron las variables siguientes: la gl&aacute;ndula afectada, el tipo de patolog&iacute;a, los resultados histopatol&oacute;gicos y las modalidades terap&eacute;uticas empleadas. Esta informaci&oacute;n se obtuvo de las historias cl&iacute;nicas de los pacientes e informes anatomopatol&oacute;gicos. El procesamiento de los datos se realiz&oacute; en una microcomputadora, mediante la utilizaci&oacute;n del paquete de programas estad&iacute;sticos SPSS para Windows y los resultados se resumieron en tablas estad&iacute;sticas mediante porcentajes. </p><h4>Resultados <br> </h4> <p>La distribuci&oacute;n del universo seg&uacute;n edad y sexo determin&oacute; un comportamiento similar entre ambos sexos; en el masculino se present&oacute; un total de 54 pacientes y en el femenino 53, para el 50,5 y 49,5 %, respectivamente. Las edades oscilaron entre 21 y 88 a&ntilde;os, con una media de 55,2 a&ntilde;os en los adenomas, 63,1 en los carcinomas, 48,4 a&ntilde;os en los tumores no epiteliales, 60,7 en los tumores secundarios, y solo se present&oacute; un paciente con linfoma maligno, de 38 a&ntilde;os. Para todas las afecciones de gl&aacute;ndulas salivales la edad media fue de 54,5 a&ntilde;os (tabla 1).</p> <p align="center"> Tabla 1.Distribuci&oacute;n de las afecciones tumorales de gl&aacute;ndulas salivales seg&uacute;n edad y sexo</p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="3">Afecciones</td><td colspan="2"> <div align="center">Sexo</div></td><td rowspan="3"> <div align="center">Total</div></td><td rowspan="3"> <div align="center">Edad media (a&ntilde;os)</div></td></tr> <tr> <td> <div align="center">Masculino</div></td><td> <div align="center">Femenino </div></td></tr> <tr> <td rowspan="2"> <div align="center">39</div></td><td rowspan="2"> <div align="center">25</div></td></tr> <tr> <td>Adenomas</td><td> <div align="center">74 </div></td><td> <div align="center">55,2</div></td></tr> <tr> <td>Carcinomas </td><td> <div align="center">8</div></td><td> <div align="center">11</div></td><td> <div align="center">19 </div></td><td> <div align="center">63,1</div></td></tr> <tr> <td>Tumores epiteliales </td><td> <div align="center">3</div></td><td> <div align="center">2</div></td><td> <div align="center">5</div></td><td> <div align="center">48,4</div></td></tr> <tr> <td>Linfomas</td><td> <div align="center">1</div></td><td> <div align="center">- </div></td><td> <div align="center">1</div></td><td> <div align="center">38,0<span class="superscript">*</span></div></td></tr> <tr> <td height="18">Tumores secundarios </td><td height="18"> <div align="center">3</div></td><td height="18"> <div align="center">5</div></td><td height="18"> <div align="center">8</div></td><td height="18"> <div align="center">60,7</div></td></tr> <tr> <td height="18">Total (%)</td><td height="18"> <div align="center">54 (50,5) </div></td><td height="18"> <div align="center">53 (49,5)</div></td><td height="18"> <div align="center">107 </div></td><td height="18"> <div align="center">54,5</div></td></tr> </table> <p align="center"> Fuente: planilla de datos. <br> <span class="superscript">*</span> Edad del &uacute;nico paciente presentado.</p> <p>Dentro de las enfermedades neopl&aacute;sicas presentadas encontramos que la gl&aacute;ndula par&oacute;tida fue la m&aacute;s afectada (81,3 %); en esta, los adenomas fueron 65 y representaron el 74,7 % , 12 carcinomas (13,8 %), 4 tumores no epiteliales, 1 linfoma y 5 met&aacute;stasis. En la gl&aacute;ndula submaxilar se present&oacute; el 7,5 % de los tumores reportados con 3 adenomas (37,5 %), 1 carcinoma, 1 tumor no epitelial y 3 met&aacute;stasis. Las tumoraciones de gl&aacute;ndula sublingual representaron el 1,9 %, con 1 adenoma y 1 carcinoma. En las gl&aacute;ndulas accesorias (10,3 %) aparecieron 6 adenomas (54,5 %) y 5 carcinomas (45,5 %). Los adenomas fueron la afecci&oacute;n m&aacute;s frecuente en 74 pacientes (69,2 %) seguido por los carcinomas (17,8 %), tumores secundarios (7,4 %) y no epiteliales (4,7 %) (tabla 2). <br> </p> <p align="center">Tabla 2.Distribuci&oacute;n de las afecciones tumorales de gl&aacute;ndulas salivales seg&uacute;n localizaci&oacute;n anat&oacute;mica</p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td rowspan="2" width="18%">Afecciones </td><td colspan="2"> <div align="center">Par&oacute;tida </div></td><td colspan="2"> <div align="center">Submaxilar</div></td><td colspan="2"> <div align="center">Sublingual</div></td><td colspan="2"> <div align="center">Accesoria</div></td><td width="8%"> <div align="center">Total</div></td><td width="17%"> <div align="center">No.</div></td></tr> <tr> <td width="6%"> <div align="center">No.</div></td><td width="7%"> <div align="center">%</div></td><td width="6%"> <div align="center">No.</div></td><td width="9%"> <div align="center">%</div></td><td width="6%"> <div align="center">No.</div></td><td width="8%"> <div align="center">%</div></td><td width="8%"> <div align="center">No.</div></td><td width="7%"> <div align="center">%</div></td><td width="8%"> <div align="center">%</div></td><td width="17%"> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td width="18%">Adenomas </td><td width="6%"> <div align="center">65</div></td><td width="7%"> <div align="center">74,7</div></td><td width="6%"> <div align="center">3</div></td><td width="9%"> <div align="center">37,5 </div></td><td width="6%"> <div align="center">1 </div></td><td width="8%"> <div align="center">50,0</div></td><td width="8%"> <div align="center">6 </div></td><td width="7%"> <div align="center">54,5</div></td><td width="8%"> <div align="center">74</div></td><td width="17%"> <div align="center">69,2</div></td></tr> <tr> <td width="18%" height="13">Carcinomas </td><td width="6%" height="13"> <div align="center">12</div></td><td width="7%" height="13"> <div align="center">13,8 </div></td><td width="6%" height="13"> <div align="center">1</div></td><td width="9%" height="13"> <div align="center">12,5</div></td><td width="6%" height="13"> <div align="center">1</div></td><td width="8%" height="13"> <div align="center">50,0</div></td><td width="8%" height="13"> <div align="center">5</div></td><td width="7%" height="13"> <div align="center">45,5 </div></td><td width="8%" height="13"> <div align="center">19</div></td><td width="17%" height="13"> <div align="center">17,8</div></td></tr> <tr> <td width="18%">Tumores no epiteliales</td><td width="6%"> <div align="center">4</div></td><td width="7%"> <div align="center">4,6 </div></td><td width="6%"> <div align="center">1</div></td><td width="9%"> <div align="center">12,5</div></td><td width="6%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">-</div></td><td width="7%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">5</div></td><td width="17%"> <div align="center">4,7</div></td></tr> <tr> <td width="18%">Linfomas </td><td width="6%"> <div align="center">1</div></td><td width="7%"> <div align="center">1,2</div></td><td width="6%"> <div align="center">-</div></td><td width="9%"> <div align="center">-</div></td><td width="6%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">-</div></td><td width="7%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">1</div></td><td width="17%"> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td width="18%">Tumores secundarios</td><td width="6%"> <div align="center">5</div></td><td width="7%"> <div align="center">5,7</div></td><td width="6%"> <div align="center">3 </div></td><td width="9%"> <div align="center">37,5</div></td><td width="6%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">-</div></td><td width="7%"> <div align="center">-</div></td><td width="8%"> <div align="center">8</div></td><td width="17%"> <div align="center">7,4</div></td></tr> <tr> <td width="18%">Total (%)</td><td width="6%"> <div align="center">87</div></td><td width="7%"> <div align="center">81,3</div></td><td width="6%"> <div align="center">8</div></td><td width="9%"> <div align="center">7,5 </div></td><td width="6%"> <div align="center">2</div></td><td width="8%"> <div align="center">1,9</div></td><td> <div align="center">11</div></td><td> <div align="center">10,3 </div></td><td width="8%"> <div align="center">107</div></td><td width="17%"> <div align="center">100,0</div></td></tr> </table> <p align="center"> Fuente: planilla de datos.</p> <p>Dentro de los adenomas encontramos 74 enfermos (69,2 %), desglosados de la siguiente forma: los adenomas pleomorfos fueron 45 y representaron el 42,1 %, 19 tumores de Warthin (17,8 %), adenoma canalicular (3,7 %), oncocitoma y adenoma de c&eacute;lulas basales 2,8 %, respectivamente (tabla 3). </p> <p align="center"> Tabla 3. Distribuci&oacute;n de los adenomas de gl&aacute;ndulas salivales seg&uacute;n tipo histopatol&oacute;gico</p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td> <div align="left">Adenomas</div></td><td> <div align="center">No.</div></td><td> <div align="center">%</div></td></tr> <tr> <td height="18"> <div align="left">Adenoma pleomorfo</div></td><td height="18"> <div align="center">45</div></td><td height="18"> <div align="center">42,1</div></td></tr> <tr> <td> <div align="left">Tumor de Warthin </div></td><td> <div align="center">19</div></td><td> <div align="center">17,8</div></td></tr> <tr> <td> <div align="left">Adenoma canalicular </div></td><td> <div align="center">4</div></td><td> <div align="center">3,7</div></td></tr> <tr> <td> <div align="left">Oncocitoma </div></td><td> <div align="center">3</div></td><td> <div align="center">2,8</div></td></tr> <tr> <td> <div align="left">Adenoma de c&eacute;lulas basales</div></td><td> <div align="center">3</div></td><td> <div align="center">2,8</div></td></tr> <tr> <td> <div align="left">Total </div></td><td> <div align="center">74 </div></td><td> <div align="center">69,2</div></td></tr> </table> <p align="center"> Fuente: planilla de datos.</p> <p>Se presentaron 19 carcinomas (17,8 %), el carcinoma mucoepidermoide (5,6 %) y el adenoqu&iacute;stico (3,7 %) fueron los m&aacute;s frecuentes (tabla 4). </p> <p align="center"> Tabla 4.Distribuci&oacute;n de los carcinomas de gl&aacute;ndulas salivales seg&uacute;n tipo histopatol&oacute;gico</p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td>Carcinomas </td><td> <div align="center">No. </div></td><td> <div align="center">%</div></td></tr> <tr> <td>Carcinoma mucoepidermoide</td><td> <div align="center">6 </div></td><td> <div align="center">5,6</div></td></tr> <tr> <td>Carcinoma adenoqu&iacute;stico </td><td> <div align="center">4</div></td><td> <div align="center">3,7</div></td></tr> <tr> <td>Adenocarcinomas</td><td> <div align="center">3</div></td><td> <div align="center">2,8</div></td></tr> <tr> <td>Carcinoma pleom&oacute;rfico </td><td> <div align="center">2 </div></td><td> <div align="center">1,9</div></td></tr> <tr> <td>Carcinoma epidermoide</td><td> <div align="center">2 </div></td><td> <div align="center">1,9</div></td></tr> <tr> <td>Carcinoma de c&eacute;lulas claras </td><td> <div align="center">1 </div></td><td> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td>Carcinoma de c&eacute;lulas acinares </td><td> <div align="center">1</div></td><td> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td>Total</td><td> <div align="center">19 </div></td><td> <div align="center">17,8</div></td></tr> </table> <p align="center"> Fuente: planilla de datos.</p> <p>Otros tumores representaron el 14,9 % de la casu&iacute;stica. Luego de analizar los grupos I y II -es conveniente mencionar que el grupo III de la OMS se refiere a los tumores no epiteliales- se encontraron 5 en la serie; en el grupo IV representado por los linfomas malignos hubo 1 caso, que represent&oacute; el 0,9 % del total. El grupo V de la OMS hace alusi&oacute;n a los tumores secundarios; dentro de este grupo encontramos 7 met&aacute;stasis (6,5 %), 6 de ellas de carcinomas espinocelulares de la piel de la cara y una met&aacute;stasis de un carcinoma de c&eacute;lulas peque&ntilde;as pulmonar, todas ipsilaterales a la lesi&oacute;n primitiva. En el grupo VI est&aacute;n los tumores no clasificados; en nuestro estudio no tuvimos ning&uacute;n caso (tabla 5).</p> <p align="center"> Tabla 5.Distribuci&oacute;n de otros tumores de gl&aacute;ndulas salivales seg&uacute;n tipo histopatol&oacute;gico</p><table width="75%" border="1" align="center"> <tr> <td height="22">Tumores </td><td height="22"> <div align="center">No.</div></td><td height="22"> <div align="center">%</div></td></tr> <tr> <td height="15">Tumores no epiteliales </td><td height="15"> <div align="center"></div></td><td height="15"> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td>Lipoma</td><td> <div align="center">2</div></td><td> <div align="center">1,9</div></td></tr> <tr> <td height="16"> Mixolipoma </td><td height="16"> <div align="center">1 </div></td><td height="16"> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td>Fibroma </td><td> <div align="center">1</div></td><td> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td>Neurofibroma </td><td> <div align="center">1</div></td><td> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td>Linfomas </td><td> <div align="center"></div></td><td> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td height="21">Linfoma de Hodgkin </td><td height="21"> <div align="center">1</div></td><td height="21"> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td height="21">Tumores secundarios (met&aacute;stasis) </td><td height="21"> <div align="center"></div></td><td height="21"> <div align="center"></div></td></tr> <tr> <td height="21">Carcinomas espinocelulares de piel facial </td><td height="21"> <div align="center">7 </div></td><td height="21"> <div align="center">6,5</div></td></tr> <tr> <td height="21">Carcinoma de c&eacute;lulas peque&ntilde;as pulmonar </td><td height="21"> <div align="center">1</div></td><td height="21"> <div align="center">0,9</div></td></tr> <tr> <td height="21">Total </td><td height="21"> <div align="center">14</div></td><td height="21"> <div align="center">14,9</div></td></tr> </table> <p align="center">Fuente: planilla de datos.</p> <p></p> <p></p> <p>En la serie de enfermos, a 91 pacientes (88,8 %) se les realiz&oacute; submaxilectom&iacute;a o parotidectom&iacute;a subtotal para los tumores benignos localizados en l&oacute;bulo superficial, y parotidectom&iacute;a total para los tumores localizados en l&oacute;bulo profundo. En el caso de tumores malignos, siempre se practic&oacute; submaxilectom&iacute;a o parotidectom&iacute;a total, y en algunos casos parotidectom&iacute;a radical con sacrificio del nervio facial, combinada con disecci&oacute;n radical de cuello en los estadios m&aacute;s avanzados de la enfermedad. En el resto de los tumores malignos parot&iacute;deos se respet&oacute; el s&eacute;ptimo par por ser tumores en estadio I. En el carcinoma de gl&aacute;ndula sublingual se realiz&oacute; ex&eacute;resis de esta y la submaxilectom&iacute;a asociada; en tumores malignos de gl&aacute;ndulas accesorias palatinas la maxilectom&iacute;a fue el tratamiento de elecci&oacute;n. La radioterapia fue utilizada siempre como arma terap&eacute;utica sobre el lecho quir&uacute;rgico en 15 de los 19 casos, para el 75 %.</p><h4>Discusi&oacute;n <br> </h4> <p>Las gl&aacute;ndulas salivales constituyen uno de los &oacute;rganos con mayor variedad de expresi&oacute;n histopatol&oacute;gica, debido a la presencia de c&eacute;lulas en los conductos epiteliales. Debido a esta gran diversidad y a la ausencia de un criterio un&aacute;nime, han surgido numerosas clasificaciones seg&uacute;n los autores y las escuelas, lo cual puede llevar incluso a una actitud terap&eacute;utica err&oacute;nea por parte del cirujano. <span class="superscript">1</span>-<span class="superscript">3</span> <br> </p> <p>Se observa un predominio de las afecciones benignas por todos los grupos et&aacute;reos, donde se refleja la alta incidencia de estas en las gl&aacute;ndulas salivales mayores. En orden de frecuencia, la gl&aacute;ndula par&oacute;tida (80 %) es la m&aacute;s afectada, seguido de la gl&aacute;ndula submaxilar (10 %), el 10 % restante se divide entre la gl&aacute;ndula sublingual y las gl&aacute;ndulas salivales menores. Las neoplasias de origen benigno (2/3) son m&aacute;s frecuentes que las de origen maligno (1/3); las benignas constituyen el 80 % de las lesiones parot&iacute;deas, del 60-65 % de las submaxilares y el 50 % de las que afectan a gl&aacute;ndulas salivales menores. Sin embargo, al nivel de la gl&aacute;ndula sublingual, del 60-70 % de las lesiones que se encuentran son de tipo maligno. A tenor de estos datos se podr&iacute;a concluir que a mayor tama&ntilde;o glandular, mayor probabilidad de benignidad; sin embargo, el 75 % de todas las lesiones malignas tienen su asiento en la gl&aacute;ndula par&oacute;tida, precisamente la mayor de todas, debido a que se trata de la localizaci&oacute;n m&aacute;s frecuente de los tumores que afectan a gl&aacute;ndulas salivales. Asimismo, se aprecia c&oacute;mo las neoplasias malignas aumentan despu&eacute;s de los 55 a&ntilde;os, lo cual coincide con lo planteado por numerosos autores.<span class="superscript">1</span>-<span class="superscript">3,6-8,10-16 </span> <br> </p> <p>En otros informes, <span class="superscript">1</span>-3,6 se coincide con respecto al predominio del adenoma pleomorfo en el sexo femenino y del tumor de Warthin en el masculino. <br> </p> <p>Las neoplasias malignas muestran predilecci&oacute;n por el sexo masculino con el 73,5 %; sin embargo, la distribuci&oacute;n por sexo es contradictoria en muchas de las series revisadas, ya que unas muestran preponderancia por el femenino y otras un marcado predominio por el masculino. <span class="superscript">2-4,6,16</span> El carcinoma mucoepidermoide fue la entidad maligna de m&aacute;s alta incidencia en esta serie. <br> </p> <p>La distribuci&oacute;n de las afecciones por localizaci&oacute;n anat&oacute;mica se comport&oacute; acorde con lo planteado en la bibliograf&iacute;a consultada, <span class="superscript">1</span>-<span class="superscript">4,6-8,13,14,16</span> pues se observa un franco predominio del adenoma pleomorfo en la par&oacute;tida; asimismo, el tumor de Warthin fue exclusivo de esta gl&aacute;ndula; de los malignos, el m&aacute;s frecuente es el carcinoma mucoepidermoide, seguido del carcinoma adenoide qu&iacute;stico o cilindroma, el adenoma pleomorfo maligno o tumor mixto maligno y el adenocarcinoma, mientras que en la gl&aacute;ndula submaxilar y la sublingual, el m&aacute;s frecuente es el carcinoma adenoide qu&iacute;stico. <br> </p> <p>Macrosc&oacute;picamente, las lesiones benignas suelen ser &uacute;nicas y bien definidas, mientras que las malignas suelen presentar m&uacute;ltiples nidos separados entre s&iacute;, con diferentes aspectos y tama&ntilde;os. <br> </p> <p>M&aacute;rgenes tumorales poco definidos y afectaci&oacute;n del tejido vecino circundante sugieren malignidad, aunque algunos tumores benignos se comportan de forma similar, como el oncocitoma o el tumor de Warthin. El carcinoma adenoide qu&iacute;stico, el carcinoma mucoepidermoide de alto grado, el adenocarcinoma poco diferenciado y el tumor mixto maligno invasivo, presentan de forma caracter&iacute;stica unos bordes indistinguibles con gran infiltraci&oacute;n perilesional. <br> </p> <p>Dentro de los procedimientos quir&uacute;rgicos m&aacute;s utilizados se encontr&oacute; que fue la parotidectom&iacute;a subtotal el tratamiento de elecci&oacute;n para entidades benignas de la par&oacute;tida. La parotidectom&iacute;a total se efectu&oacute; tanto en procesos benignos como malignos, mientras que la parotidectom&iacute;a radical siempre se realiz&oacute; en neoplasias malignas y el vaciamiento de la celda submaxilar fue el &uacute;nico procedimiento para afecciones de la gl&aacute;ndula submandibular. Esta conducta es la seguida por numerosas escuelas en la actualidad. <span class="superscript">2-4,6-8 </span> <br> </p> <p>Los tumores primarios malignos constituyen del 10 al 15 % de todos los tumores de gl&aacute;ndulas salivales, mientras que las met&aacute;stasis suponen el 3 %.<span class="superscript">1</span>-<span class="superscript">8</span> <br> </p> <p>El tratamiento de elecci&oacute;n es quir&uacute;rgico, en dependencia del tipo de tumor, grado de malignidad, localizaci&oacute;n y presencia o no de adenopat&iacute;as. Tumores de bajo grado se tratar&aacute;n por medio de una parotidectom&iacute;a superficial o total conservadora (seg&uacute;n la localizaci&oacute;n), aunque en ocasiones, la invasi&oacute;n local puede llevar a sacrificar y reparar algunas ramas nerviosas afectadas. Si el nervio se encuentra envuelto por la tumoraci&oacute;n o le afecta en gran medida, deber&aacute; ser sacrificado. En el primer a&ntilde;o puede recurrir en el 30 % de los casos, y en general presenta una elevada tasa de recidivas (75 %), sobre todo los de alto grado. </p> <p>Ante un compromiso histol&oacute;gico de los bordes de la lesi&oacute;n, un estado general del paciente que contraindique la cirug&iacute;a, tumores de alto grado con afectaci&oacute;n linf&aacute;tica o como alternativa al sacrificio del nervio facial, estar&aacute; indicada la radioterapia. La supervivencia depender&aacute; de m&uacute;ltiples factores, sobre todo del tipo histol&oacute;gico, la localizaci&oacute;n del tumor, la invasi&oacute;n local y la presencia o no de met&aacute;stasis. <span class="superscript">6-8</span> <br> </p> <p>Otros tumores representan del 2 al 3 % de los tumores en los adultos. Tienen su origen en los tejidos glandulares de soporte (vasos sangu&iacute;neos y linf&aacute;ticos, nervios, etc.) y su localizaci&oacute;n m&aacute;s frecuente es la gl&aacute;ndula par&oacute;tida (90 %). <br> </p> <p>Los tumores mesenquimatosos malignos (fibrosarcoma, rabdomiosarcoma, angiosarcoma, etc.), predominan en menores de 40 a&ntilde;os, suelen ser parot&iacute;deos, frecuentemente asocian con par&aacute;lisis facial, y deben ser tratados agresivamente. <span class="superscript">1</span>,<span class="superscript">9</span> <br> </p> <p>Los tumores del conducto de Stenon deben diferenciarse de una gl&aacute;ndula salival accesoria. Hasta el 21 % de la poblaci&oacute;n presenta tejido parot&iacute;deo accesorio, que se localiza anterior con respecto a la gl&aacute;ndula principal. La parotidectom&iacute;a superficial es el tratamiento adecuado, salvo que la histolog&iacute;a nos demuestre su malignidad o escasa diferenciaci&oacute;n, en cuyo caso se optar&aacute; por una parotidectom&iacute;a total, que se puede beneficiar con radioterapia posoperatoria. Finalmente, los tumores que afectan al l&oacute;bulo profundo, deben tratarse por medio de una parotidectom&iacute;a total preservando el nervio facial.<span class="superscript"> 1</span>,<span class="superscript">3,9</span> <br> </p> <p>Las met&aacute;stasis en gl&aacute;ndulas salivales mayores pueden acontecer por extensi&oacute;n en contig&uuml;idad (carcinomas cut&aacute;neos y sarcomas), o por diseminaci&oacute;n linf&aacute;tica o hemat&oacute;gena. Representan el 25 % de los tumores malignos y el 3 % de todos los tumores de gl&aacute;ndulas salivales.<span class="superscript">1,3,14</span> <br> </p> <p>La localizaci&oacute;n m&aacute;s frecuente es la gl&aacute;ndula par&oacute;tida, ya que dicha gl&aacute;ndula contiene ganglios intra y paraglandulares, que reciben el drenaje de numerosas zonas: cuero cabelludo, cara, p&aacute;rpados, nariz, naso y orofaringe, senos paranasales, etc. <br> </p> <p>Los pacientes con mayor riesgo son aquellos con melanoma o con carcinoma espinocelular, ya que estos 2 abarcan hasta el 80 % de los casos. Pueden presentarse como una adenopat&iacute;a, un absceso o incluso simulando una parotiditis. Excepcionalmente, tumores infraclaviculares pueden alcanzar la par&oacute;tida (pulm&oacute;n, mama, ri&ntilde;&oacute;n, colon). <span class="superscript">2,13-15</span> <br> </p> <p>El pron&oacute;stico de las met&aacute;stasis es muy sombr&iacute;o; los porcentajes de supervivencia var&iacute;an a los 5 a&ntilde;os desde el 67 % en los de origen cut&aacute;neo, hasta el 20 % en los de origen melanoc&iacute;tico. En caso de que el tumor primario no sea cut&aacute;neo, la supervivencia desciende hasta un 5 % a los 5 a&ntilde;os. <br> </p> <p>Las pautas de tratamiento son controvertidas; var&iacute;an desde la parotidectom&iacute;a superficial conservadora, hasta la parotidectom&iacute;a radical con vaciamiento cervical y radioterapia posoperatoria, asociadas con la resecci&oacute;n completa del tumor primario. Todo ello depender&aacute; de varios factores, como el tipo de tumor primario, su origen, la diseminaci&oacute;n local o a distancia y el estado general del paciente. <span class="superscript">1</span>-<span class="superscript">3 </span> <br> </p> <p>La gl&aacute;ndula sublingual es la menor de las gl&aacute;ndulas salivales mayores. Cuanto menor sea la gl&aacute;ndula salival, mayor probabilidad de que la masa sea maligna. As&iacute; entre el 60 y 100 % de los tumores de la gl&aacute;ndula sublingual son malignos, y en su mayor parte son carcinomas adenoide qu&iacute;sticos y carcinomas mucoepidermoides. El tratamiento deber&aacute; ser por v&iacute;a intraoral o bien extraoral (submandibular), en dependencia de lo extendida que se encuentre la neoplasia y de la amplitud mandibular del paciente. Frecuentemente ser&aacute; necesario realizar una submandibulectom&iacute;a, con vaciamiento radical asociado en caso de adenopat&iacute;as positivas. <span class="superscript">6-9,14</span> <br> </p> <p>En las gl&aacute;ndulas salivales menores, el 50 % de las lesiones son malignas, se situ&aacute;n en orden de frecuencia el carcinoma adenoide qu&iacute;stico, adenocarcinoma, tumor mixto y carcinoma mucoepidermoide. Muchos de ellos destruyen las paredes &oacute;seas, tienen elevada tendencia metast&aacute;sica y suelen ser de mal pron&oacute;stico. <br> </p> <p>Al nivel intraoral, los tumores benignos y malignos de esta regi&oacute;n afectan al paladar en el 50 % de los casos. De los benignos, el adenoma pleomorfo (56 %) muestra predilecci&oacute;n por el paladar blando y 1/3 posterior del duro, mientras que los monom&oacute;rficos se asientan en el labio superior (80 %). Deber&aacute; dejarse un adecuado margen &oacute;seo y mucoso durante su resecci&oacute;n. Entre los malignos predominan el adenoide qu&iacute;stico, adenocarcinomas y carcinoma mucoepidermoide. Se localizan en el paladar y lengua, y se opta en estos casos por cirug&iacute;as agresivas como la maxilectom&iacute;a total. La radioterapia sola no servir&aacute; de tratamiento; se reserva para aquellos casos en que se vea excedido el control quir&uacute;rgico o como tratamiento paliativo. <span class="superscript">2,13 </span> <br> </p> <p>La diversidad de actuaciones terap&eacute;uticas en tumores malignos hace dif&iacute;cil concretar una pauta &uacute;nica, lo que se manifiesta al observar la oscilaci&oacute;n presente en los porcentajes de supervivencia de diferentes estudios, tras aplicar distintos tratamientos. <span class="superscript">2,5,15</span> <br> </p> <p>Se puede concluir planteando que las afecciones tumorales se distribuyeron de forma similar en ambos sexos. Se observ&oacute; un predominio de las afecciones benignas por todos los grupos et&aacute;reos, y se reflej&oacute; la alta incidencia de estas en las gl&aacute;ndulas salivales mayores. En orden de frecuencia, la gl&aacute;ndula par&oacute;tida fue la m&aacute;s afectada, seguido de la gl&aacute;ndula submaxilar y accesorias. Las patolog&iacute;as m&aacute;s frecuentes fueron el adenoma pleomorfo y el carcinoma mucoepidermoide. La cirug&iacute;a sola o combinada con otros procederes fueron los principales pilares de tratamiento. </p><h4>Summary</h4> <p>A descriptive study of 107 patients, who had been surgically treated from salivary gland tumors in the Maxillofacial Surgery Department of &quot;Manuel Ascunce Domenech&quot; provincial teaching hospital located in Camag&uuml;ey during 10 years, was performed to describe the sex and age distribution and frequency of these tumors, their biological behavior, anatomical location and histopathological outcome. It was observed that benign neoplasias predominated in the parotid glands whereas malignant processes developed more often in submandibular glands. Pleomorphic adenoma was the most found tumor among the benign neoplasias and mucoepidermoid carcinoma was the commonest among the malignant processes. </p> <p><i>Key words: </i>tumor, salivary glands, epidemilogy, oral cavity <br> </p><h4>Referencias bibliogr&aacute;ficas</h4><ol> <!-- ref --><li> Johns ME, Wachls NE. Tumores de las gl&aacute;ndulas salivales. En: Paparella MH. Otorrinolaringolog&iacute;a. Cabeza y Cuello. 3ra ed. Vol 3. Buenos Aires: Editorial M&eacute;dica Panamericana; 1994. p.2451-83. </li> <!-- ref --><li> P&eacute;rez Abreus E, Gonz&aacute;lez Dom&iacute;nguez N. Patolog&iacute;a quir&uacute;rgica de gl&aacute;ndulas salivales. Reporte de 79 casos. Rev Cubana Estomatol 1999;37(2):212-6. </li> <!-- ref --><li> Rice DH. Salivary gland diseases. Malignant salivary gland neoplasms. Otolaryngol Clin North Am 1999;32(5):875-86. </li> <!-- ref --><li> Rabinov JD. Radiologic evaluation of the neck. Imaging of salivary gland pathology. Radiol Clin North Am 2000;38(5):80-4. </li> <!-- ref --><li> Westra HW. The surgical pathology of salivary gland neoplasms. Otolaryngol Clin North Am 1999;32(5):919-43. </li> <!-- ref --><li> Rice DH. Salivary gland disorders. Neoplastic and Nonneoplastic. Med Clin North Am 1999;83(1):197-211. </li> <!-- ref --><li> Ship JA. Diagnosing, managing and preventing salivary gland disorders. Oral Dis 2002;8:77-89.</li> <!-- ref --><li> Katz P, Fritsch MH. Salivary stones: innovative techniques in diagnosis and treatment. Curr Otolaryngol Head Neck Surg 2003;11(3):173-8.</li> <!-- ref --><li> Sinha UK, Matthew Ng. Salivary gland diseases. Surgery of the salivary glands. Otolaryngol Clin North Am 1999;32(5):887-906. </li> <!-- ref --><li> Califano J, Eisele DW. Salivary gland diseases. Benign salivary gland neoplasms. Otolaryngol Clin North Am 1999;32(5):861-73. </li> <!-- ref --><li> Chen I, Tu H. Pleomorphic adenoma of the parotid gland metastasizing to the cervical limph node. Otolaryngol Head Neck Surg 2000;122(3):455-7.</li> <!-- ref --><li> Frade Gonz&aacute;lez C, Lozano Ram&iacute;rez A. Epidemiological study of salivary glands tumors. Rev Larigol Otol Rhinol 1999;120(5):331-6.</li> <!-- ref --><li> Izquierdo M. Patolog&iacute;a de las gl&aacute;ndulas salivares. En: Mart&iacute;n-Granizo Lopez R y col. Cirug&iacute;a Oral y Maxilofacial. Madrid: Smithkline Beecham; 1997. p.1000-43. </li> <!-- ref --><li> Kaplan MJ, Johns ME. Malignant neoplasms. En: Cummings CW, Frederickson J M. Otolaringology Head and Neck Surgery. St Louis: Mosby-Year Book; 1993. p.1043-78.</li> <!-- ref --><li> Malata CM, Camilleri IG, et al. Malignant tumors of the parotid gland: A 12-year review. Br J Plastic Surg 1997;50:600-8.</li> <!-- ref --><li>Ram&iacute;rez Ponferrada R, Gallardo A. Warthin&acute;s tumor in the neck. Ann Otorrinolaringol Iberoam 1999;26(6):557- 64 .</li> </ol> <p>Recibido: 20 de octubre de 2003. Aprobado: 15 de noviembre de 2003. <br> Dr. <i>Oscar Garc&iacute;a-Roco P&eacute;rez</i>. Sta. Rita No. 5 entre Rep&uacute;blica y Sta. Rosa. CP 70100, Camag&uuml;ey, Cuba. e-mail: <a href="mailto:ogarcia@finlay.cmw.sld.cu%20">ogarcia@finlay.cmw.sld.cu </a> </p> <p></p> <p><a href="#autor"><span class="superscript">1</span> Especialista de I Grado en Cirug&iacute;a Maxilofacial. Aspirante a Doctor en Ciencias M&eacute;dicas. </a><a name="cargo"></a></p>

References

  • Johns, ME
    Wachls, NE
      Tumores de las glándulas salivales
    Paparella, MH
      Otorrinolaringología. Cabeza y Cuello 1994 3ra ed 2451-83Buenos Aires Editorial Médica Panamericana
  • Pérez Abreus, E
    González Domínguez, N
      Patología quirúrgica de glándulas salivales: Reporte de 79 casos Rev Cubana Estomatol 1999 37 2 2 212-6
  • Rice, DH
      Salivary gland diseases: Malignant salivary gland neoplasms Otolaryngol Clin North Am 1999 32 5 5 875-86
  • Rabinov, JD
      Radiologic evaluation of the neck: Imaging of salivary gland pathology Radiol Clin North Am 2000 38 5 5 80-4
  • Westra, HW
      The surgical pathology of salivary gland neoplasms Otolaryngol Clin North Am 1999 32 5 5 919-43
  • Rice, DH
      Salivary gland disorders: Neoplastic and Nonneoplastic Med Clin North Am 1999 83 1 1 197-211
  • Ship, JA
      Diagnosing, managing and preventing salivary gland disorders Oral Dis 2002 8 77-89
  • Katz, P
    Fritsch, MH
      Salivary stones: innovative techniques in diagnosis and treatment Curr Otolaryngol Head Neck Surg 2003 11 3 3 173-8
  • Sinha, UK
    Matthew, Ng
      Salivary gland diseases: Surgery of the salivary glands Otolaryngol Clin North Am 1999 32 5 5 887-906
  • Califano, J
    Eisele, DW
      Salivary gland diseases: Benign salivary gland neoplasms Otolaryngol Clin North Am 1999 32 5 5 861-73
  • Chen, I
    Tu, H
      Pleomorphic adenoma of the parotid gland metastasizing to the cervical limph node Otolaryngol Head Neck Surg 2000 122 3 3 455-7
  • Frade González, C
    Lozano Ramírez, A
      Epidemiological study of salivary glands tumors Rev Larigol Otol Rhinol 1999 120 5 5 331-6
  • Izquierdo, M
      Patología de las glándulas salivares
    Martín-Granizo Lopez, R
      Cirugía Oral y Maxilofacial 1997 1000-43Madrid Smithkline Beecham
  • Kaplan, MJ
    Johns, ME
      Malignant neoplasms
    Cummings, CW
    Frederickson, J M
      Otolaringology Head and Neck Surgery 1993 1043-78St Louis Mosby-Year Book
  • Malata, CM
    Camilleri, IG
      Malignant tumors of the parotid gland: A 12-year review Br J Plastic Surg 1997 50 600-8
  • Ramírez Ponferrada, R
    Gallardo, A
      Warthin´s tumor in the neck Ann Otorrinolaringol Iberoam 1999 26 6 6 557- 64
History: