Nueva técnica de acceso cameral y localización de los conductos en molares permanentes
Abstract:

Se presenta una nueva técnica de acceso cameral y de localización de los conductos que utiliza un punto de referencia fijo para todos los molares desde el cual se retira el techo de la cámara pulpar mientras se localizan los conductos. Así se garantiza, con mayor rapidez, la exploración del 100 % del conducto mesiovestibular, incluso en molares difíciles y por personal poco adiestrado.

A cavity access and canal location technique is presented in this paper. It uses a fixed bench mark for all the molars from which the tegmen of the pulpar cavity is removed while canals are located. In this way, we guarantee a faster 100 % scanning of mesiovestibular canals, even in difficult molars, by a personnel with low level of training.

Keywords:
    • MOLAR;
    • DENTICION PERMANENTE;
    • DESGASTE DEL DIENTE;
    • MOLAR;
    • DENTITION, DERMANENT;
    • TOOTH ATTRITION.
<H3> <B>T&eacute;cnicas</B></H3> Facultad de Estomatolog&iacute;a <BR>Instituto Superior de Ciencias M&eacute;dicas de La Habana <H2> Nueva t&eacute;cnica de acceso cameral y localizaci&oacute;n de los conductos en molares permanentes</H2> <I><A HREF="#x">Dra. Rosal&iacute;a E. Echeverr&iacute;a Elissalt,<SUP>1</SUP> Dra. Mercedes Duque Fuerte,<SUP>2</SUP> Dra. Caridad Seino Dorbignit,<SUP>3</SUP> Dr. Saturnino T. Alem&aacute;n L&oacute;pez<SUP>4</SUP> y Dra. Climalda Caba&ntilde;as Lores<SUP>5</SUP></A></I> <H4> RESUMEN</H4> Se presenta una nueva t&eacute;cnica de acceso cameral y de localizaci&oacute;n de los conductos que utiliza un punto de referencia fijo para todos los molares desde el cual se retira el techo de la c&aacute;mara pulpar mientras se localizan los conductos. As&iacute; se garantiza, con mayor rapidez, la exploraci&oacute;n del 100 % del conducto mesiovestibular, incluso en molares dif&iacute;ciles y por personal poco adiestrado. <P>Descriptores DeCS: MOLAR; DENTICION PERMANENTE; DESGASTE DEL DIENTE. <P>Muchos de los fracasos en el tratamiento de los molares son causados por un acceso inadecuado a los conductos, a&uacute;n cuando existen zonas espec&iacute;ficas en la cara oclusal de estos dientes que pueden ser tomadas como referencia para crear una cavidad con la forma anat&oacute;mica de la c&aacute;mara pulpar y que permita, al penetrar en &eacute;sta, eliminar el contenido de la pulpa coronaria y localizar los conductos radiculares. <P>Es com&uacute;n aceptar que la forma externa de la cavidad de acceso cameral sea triangular de base vestibular en los molares superiores y de base mesial en los inferiores, como triangulares son en ese sentido los pisos de las c&aacute;maras pulpares.<SUP>1-12</SUP> <P>Autores de reconocido prestigio inician la penetraci&oacute;n en la c&aacute;mara a trav&eacute;s de la fosa central<SUP>1,2,4,6,7,9-12</SUP> o como <I>Ingle</I>, <I>Noboru </I>y <I>Somme</I>r<SUP>3,5,8</SUP> desde la fosa mesial; despu&eacute;s en direcci&oacute;n al conducto palatino de los molares superiores y hacia el conducto distal de los inferiores, de esta forma se aprovecha la amplitud de los orificios de entrada a esos conductos. Todos los autores consultados dilatan la apertura, remueven el techo y exploran el resto de los conductos.<SUP>1-17</SUP> Despu&eacute;s de ser utilizada esta t&eacute;cnica por muchos a&ntilde;os en nuestra pr&aacute;ctica profesional y en la docencia de pre y posgrado, observamos que existen dificultades en la localizaci&oacute;n de los conductos radiculares en los molares, y en especial el conducto mesiovestibular (CMV). <P>Teniendo en consideraci&oacute;n la experiencia acumulada por nuestros colegas y la nuestra en particular en este campo, nos propusimos simplificar la t&eacute;cnica mediante el empleo de un punto de abordaje quir&uacute;rgico fijo que facilitara su realizaci&oacute;n, y de manera reproductible, permitiera el acceso a la c&aacute;mara pulpar y la localizaci&oacute;n de los conductos radiculares en molares y por lo tanto, el tratamiento endod&oacute;ntico de &eacute;stos, a&uacute;n por personal no altamente especializado. <H4> M&Eacute;TODOS</H4> Se realiz&oacute; un estudio experimental en el que se utilizaron 100 molares permanentes superiores y 100 inferiores, que por diversas causas fueron extra&iacute;dos a pacientes cubanos en los servicios docente-asistenciales de la Facultad de Estomatolog&iacute;a del ISCM-H, que conformaron una muestra al azar. Mediante un muestreo peri&oacute;dico sistem&aacute;tico se garantiz&oacute; la inclusi&oacute;n de todos los modelos anat&oacute;micos seg&uacute;n el contorno de las coronas. En 50 molares superiores y 50 inferiores se utilizaron las t&eacute;cnicas tradicionales descritas por la mayor&iacute;a de los investigadores que sirvieron de modelo control para su comparaci&oacute;n y que se resumen en las figuras 1 y 2.<SUP>1,2</SUP> <BR>&nbsp; <CENTER> <a href="/img/revistas/est/v37n1/f0108399.jpg"><img src="/img/revistas/est/v37n1/f0108399.jpg" alt="Fig. 1. Pasos de la técnica convencional." border=1 height=473 width=317></a> </CENTER> <CENTER>Fig. 1. Pasos de la t&eacute;cnica convencional.</CENTER> <CENTER>A. Molar superior.</CENTER> <CENTER>B. Molar inferior.</CENTER> <CENTER>&nbsp;a. Penetraci&oacute;n en la fosa central.</CENTER> <CENTER>&nbsp;b. Localizaci&oacute;n del conducto palatino y retirada del techo de la c&aacute;mara pulpar.</CENTER> <CENTER>&nbsp;c. Localizaci&oacute;n del conducto distovestibular.</CENTER> <CENTER>&nbsp;d. Conducto mesiovestibular.</CENTER> <CENTER> <A HREF="/img/revistas/est/v37n1/f0208399.gif"><IMG SRC="/img/revistas/est/v37n1/f0208399.gif" ALT="Fig. 2. Variantes de la técnica convencional." BORDER=1 HEIGHT=213 WIDTH=230></A> </CENTER> <CENTER>Fig. 2. Variantes de la t&eacute;cnica convencional.</CENTER> <CENTER>1. Apertura con fresa redonda o de fisura (alta velocidad).</CENTER> <CENTER>2. Localizaci&oacute;n y exposici&oacute;n de la c&aacute;mara pulpar con fresas 4, 6, 8 (baja velocidad).</CENTER> <CENTER>3.Terminado de la apertura y retirada del techo (movimientos de dentro hacia afuera).</CENTER> <CENTER>4. Extracci&oacute;n del contenido de la c&aacute;mara pulpar y localizaci&oacute;n de los conductos.</CENTER> Estas t&eacute;cnicas fueron aplicadas por miembros de nuestro grupo que no conoc&iacute;an de antemano la variante de acceso cameral que proponemos. <P>Para su comparaci&oacute;n en 50 molares superiores y en 50 molares inferiores se utiliz&oacute; la t&eacute;cnica que se propone, realizada por uno de los autores del presente trabajo (REEE). <P>Los dientes se analizaron durante la realizaci&oacute;n de la t&eacute;cnica mediante la exploraci&oacute;n cl&iacute;nica y sondaje, posteriormente se confirm&oacute; la localizaci&oacute;n y canalizaci&oacute;n de los conductos mediante el desgaste longitudinal de cada molar. <H4> Descripci&oacute;n de la t&eacute;cnica</H4> La cavidad de acceso cameral en ambos grupos de molares, se inicia en un punto situado en el reborde oclusal de la c&uacute;spide mesiovestibular, equidistante entre la cima y la base de &eacute;sta (fig. 3). <CENTER> <A HREF="/img/revistas/est/v37n1/f0308399.jpg"><IMG SRC="/img/revistas/est/v37n1/f0308399.jpg" ALT="Fig. 3. Puntos quirúrgicos para todos los molares." BORDER=1 HEIGHT=355 WIDTH=284></A> </CENTER> <CENTER>Fig. 3. Puntos quir&uacute;rgicos para todos los molares.</CENTER> <CENTER>A. Molares superiores.</CENTER> <CENTER>B. Molares inferiores.</CENTER> <P>Con una fresa 701 accionada a superalta velocidad y dirigida perpendicularmente a la cara oclusal, se profundiza en dentina, hasta sentir la "ca&iacute;da" en la cavidad del cuerno mesiovestibular. Se sondea para comprobar la relaci&oacute;n de &eacute;ste con el conducto de la ra&iacute;z correspondiente (fig. 4). <CENTER> <A HREF="/img/revistas/est/v37n1/f0408399.jpg"><IMG SRC="/img/revistas/est/v37n1/f0408399.jpg" ALT="Fig. 4. Nueva técnica. Molar superior." BORDER=1 HEIGHT=232 WIDTH=330></A> </CENTER> <CENTER>Fig. 4. Nueva t&eacute;cnica. Molar superior.</CENTER> <CENTER>A. Profundizaci&oacute;n a trav&eacute;s del punto quir&uacute;rgico con fresa No. 701.</CENTER> <CENTER>B. Exploraci&oacute;n para verificar el CMV.</CENTER> En los molares superiores nos extendemos desde ese punto (manteniendo la profundidad de la parte activa de la fresa) hacia distal de 1,5 a 3 mm hasta rebasar ligeramente la estr&iacute;a vestibular, eliminando el techo y conformando la base del tri&aacute;ngulo paralela al contorno externo de la corona del diente (fig. 5). En ese lugar se encontrar&aacute;n el cuerno y conducto correspondientes a la ra&iacute;z distobucal, que se verifican por sondeo. <CENTER> <a href="/img/revistas/est/v37n1/f0508399.jpg"><img src="/img/revistas/est/v37n1/f0508399.jpg" alt="Fig. 5. Molares superiores." border=1 height=198 width=305></a> </CENTER> <CENTER>Fig. 5. Molares superiores.</CENTER> <CENTER>A. Extensi&oacute;n siguiendo el contorno externo de la corona hasta rebasar la estr&iacute;a M.V.</CENTER> <CENTER>B. Representaci&oacute;n del nivel de profundizaci&oacute;n.</CENTER> Desde ambos orificios nos dirigimos hacia el centro de la c&uacute;spide mesiopalatina, donde se localiza el cuerno y conducto de dicha ra&iacute;z (fig. 6). Este paso permite que se quite simult&aacute;neamente en bloque el techo restante. <CENTER> <A HREF="/img/revistas/est/v37n1/f0608399.jpg"><IMG SRC="/img/revistas/est/v37n1/f0608399.jpg" ALT="Fig. 6. A. Vista oclusal. Extensión desde los vértices M y D del triángulo hacia palatino y eliminación del techo de la cámara pulpar." BORDER=1 HEIGHT=308 WIDTH=356></A> </CENTER> <CENTER>Fig. 6. A. Vista oclusal. Extensi&oacute;n desde los v&eacute;rtices M y D del tri&aacute;ngulo hacia palatino y eliminaci&oacute;n del techo de la c&aacute;mara pulpar.</CENTER> <CENTER>B. Vista lateral.</CENTER> <CENTER>&nbsp;</CENTER> <P>En los molares inferiores (fig. 7) desde el punto quir&uacute;rgico inicial en la c&uacute;spide mesiovestibular (manteniendo la profundidad de la parte activa de la fresa), nos extendemos 1,5 mm hacia lingual, se rebasa ligeramente la estr&iacute;a mesiodistal, se elimina el techo y se conforma la base del tri&aacute;ngulo paralela a la cara proximal. En ese lugar se localizar&aacute;n el cuerno y conducto mesiolingual, los cuales se verifican por sondeo. <CENTER> <A HREF="/img/revistas/est/v37n1/f0708399.jpg"><IMG SRC="/img/revistas/est/v37n1/f0708399.jpg" ALT="Fig. 7. Nueva técnica. Molar inferior." BORDER=1 HEIGHT=157 WIDTH=508></A> </CENTER> <CENTER>Fig. 7.&nbsp; Nueva t&eacute;cnica. Molar inferior.</CENTER> <CENTER>A. Punto quir&uacute;rgico. Verificar CMV.</CENTER> <CENTER>B. Extensi&oacute;n hacia lingual siguiendo el contorno de la corona hasta rebasar la estr&iacute;a MD. Verificar CML.</CENTER> <CENTER>C. Extensi&oacute;n desde los orificios de los cuernos MV y ML hacia la fisura MD (transversal) rebasando el punto de intersecci&oacute;n con la fisura longitudinal. En el v&eacute;rtice se localiza el cuerno y el conducto distal. Se verifica por sondeo. Se retira el techo de la c&aacute;mara pulpar.</CENTER> <P>Partiendo de ambos orificios, se dirige la fresa hacia la fosa central, se rebasa la estr&iacute;a mesiovestibular para localizar el cuerno y orificio de entrada del o de los conductos de la ra&iacute;z distal y se remueve simult&aacute;neamente en bloque el resto del techo, al igual que sucede en los molares superiores. <H4> RESULTADOS</H4> De los 50 molares superiores tratados por la t&eacute;cnica tradicional, fueron localizados en primera instancia sin dificultad los 50 conductos palatinos, para el 100 %, 35 CMV (70 %) y 20 distovestibulares (CDV), para el 40 %. En las referidas exploraciones fue necesario adem&aacute;s ampliar la cavidad y explorar en repetidas ocasiones para sondearlas. <P>En los 50 molares superiores donde se aplic&oacute; la t&eacute;cnica propuesta se localizaron directamente todos los CMV y palatinos, para el 100 % de efectividad. En 17 de ellos no se localiz&oacute; en el sitio previsto el CDV, (34 %). Esta cifra se redujo y se llev&oacute; al 100 % la efectividad al modificarse la t&eacute;cnica para el caso de estos molares, en los que a partir del punto quir&uacute;rgico, se sigue en el contorno externo de la corona en lugar de formar una l&iacute;nea recta. <CENTER> <A HREF="/img/revistas/est/v37n1/f0808399.jpg"><IMG SRC="/img/revistas/est/v37n1/f0808399.jpg" ALT="Fig. 8. Variantes anatómicas." BORDER=1 HEIGHT=295 WIDTH=377></A> </CENTER> <CENTER>Fig. 8. Variantes anat&oacute;micas.</CENTER> <CENTER>A. Molar superior compacto.</CENTER> <CENTER>B. Ubicaci&oacute;n del cuarto conducto (molar superior).</CENTER> <CENTER>C. Dos conductos en molares inferiores.</CENTER> En los molares inferiores, por otra parte, se obtuvo el 100 % de resultados satisfactorios en todos los conductos con ambas t&eacute;cnicas. <H4> DISCUSI&Oacute;N</H4> Si analizamos los medios con los cuales se realiza el abordaje a la c&aacute;mara pulpar en ambas t&eacute;cnicas se puede observar que en la t&eacute;cnica tradicional es necesario el cambio de fresa y de velocidad, mientras que en la t&eacute;cnica propuesta, toda la cavidad se realiza con superalta velocidad y fresa n&uacute;mero 701, y no se necesita la preparaci&oacute;n de "dentro-fuera" (fig. 2), porque se retira el techo simult&aacute;neamente con la localizaci&oacute;n de cada conducto. <P>Al comparar la forma de la cavidad de acceso cameral en la muestra estudiada y su relaci&oacute;n con la forma de la c&aacute;mara al nivel del piso, se pudo apreciar que es triangular aun cuando sea ligeramente trapezoidal de base menor hacia distal, en molares inferiores con 2 conductos,<SUP>13-15,19,20</SUP> por lo que desde el punto de vista endo-d&oacute;ntico fue posible retirar adecuadamente la pulpa cameral en ambas t&eacute;cnicas y se realiz&oacute; lo aconsejado por muchos autores: una cavidad de forma triangular de base vestibular en los superiores y mesial en los inferiores (fig. 1).<SUP>1-12</SUP> <P>Se puede sentir "la ca&iacute;da" en c&aacute;mara, tanto si se comienza el abordaje quir&uacute;rgico por la fosa central o mesial, como a trav&eacute;s del cuerno MV; sin embargo, la altura del piso al techo es mayor desde este &uacute;ltimo punto (fig. 2). Con respecto a la profundidad de la fresa y la posible lesi&oacute;n del piso de la c&aacute;mara pulpar, se apreci&oacute; que aunque es probable, esta eventualidad no se produjo. <P>En la t&eacute;cnica propuesta hubo menor sobreextensi&oacute;n de la cavidad en profundidad que se interpreta as&iacute;: el operador apoya el contra&aacute;ngulo sobre la c&uacute;spide MV (o mantiene la altura, si &eacute;sta faltara), mientras penetra en el cuerno MV y mantiene la profundidad para realizar todas las maniobras en el techo y paredes laterales. La fresa, que no excede la distancia de 9 mm aproximadamente, lo gu&iacute;a tambi&eacute;n. <P>En la t&eacute;cnica convencional despu&eacute;s de retirado el techo, se comienza la preparaci&oacute;n de dentro-afuera generalmente con fresa redonda, ya sin esa gu&iacute;a (fig. 2). <P>Se coincide con <I>Ingle</I>, <I>Leonardo</I> y otros <SUP>1,6,10,15</SUP> en que los conductos palatinos de los molares superiores y distales de los inferiores, por su mayor amplitud, son m&aacute;s f&aacute;ciles de localizar (100 %) en ambas t&eacute;cnicas. <P>Sin embargo, el abordaje primario de &eacute;stos, la retirada del techo primero para la localizaci&oacute;n posterior del resto de los conductos y la situaci&oacute;n m&aacute;s apical del piso a ese nivel, parecen condicionar una cavidad m&aacute;s amplia y alejada de mesial, lo que propici&oacute; en la muestra estudiada dificultades en la localizaci&oacute;n de los CMV superiores (70 %). Si estos resultados se comparan con los obtenidos en la nueva t&eacute;cnica, donde la amplitud de la cavidad de acceso cameral est&aacute; estrictamente determinada por el tama&ntilde;o y extensi&oacute;n de la c&aacute;mara pulpar y la localizaci&oacute;n primaria del CMV (100 %), resulta una cavidad peque&ntilde;a y mesializada. Analizando si esta diferencia afecta la libre entrada del instrumental en esos conductos, se pudo precisar que no, ya que la inclinaci&oacute;n diagonal vest&iacute;bulo-lingual en el conducto palatino y mesiodistal en el conducto distal que sigue el instrumental endod&oacute;ntico, se corresponde con igual inclinaci&oacute;n de esas ra&iacute;ces. <P>En la verificaci&oacute;n cl&iacute;nica e histol&oacute;gica en todos los molares de la correspondencia entre el punto anat&oacute;mico en corona, con el cuerno m&aacute;s prominente en pulpa, el MV demuestra que es posible llegar con mayor certeza y menor riesgo a la c&aacute;mara a trav&eacute;s del punto quir&uacute;rgico en la t&eacute;cnica propuesta, que s&iacute; se utiliza la fosa central, donde la distancia del techo al piso es menor. Asimismo, se garantiza penetrar en el conducto de mayor dificultad (CMV) del grupo II clasificaci&oacute;n Kuttler.<SUP>18</SUP> <P>En los cortes histol&oacute;gicos se apreci&oacute; que de los 35 CMV de dif&iacute;cil localizaci&oacute;n en molares superiores tratados con la t&eacute;cnica convencional, 10 de ellos correspond&iacute;an a c&aacute;maras muy calcificadas, dificultad descrita por otros autores.<SUP>3,14,16</SUP> Estos conductos hubieran sido explorados sin dificultad o precisadas sus calcificaciones si se hubiera comenzado el acceso por el cuerno y ra&iacute;z MV. <P>En el caso de los CDV, los resultados iniciales con el uso de ambas t&eacute;cnicas fueron similares, sin embargo, se precis&oacute; que de los 17 CDV de dif&iacute;cil localizaci&oacute;n en molares superiores tratados por la t&eacute;cnica propuesta, todos correspondieron a molares de coronas triangulares y compactadas. Se relacion&oacute; esta caracter&iacute;stica con la conformaci&oacute;n de la base del tri&aacute;ngulo, que se hizo recta desde el punto quir&uacute;rgico y no se sigui&oacute; el contorno externo de la corona. Esta cifra se redujo llevando al 100 % de efectividad al modificarse la t&eacute;cnica y seguirse siempre, a partir del punto quir&uacute;rgico, el contorno externo de la corona (fig. 8a). <P>La presencia de un 4to. conducto en los superiores y de uno 2do. en los inferiores<SUP>17,19,20</SUP> quedan dentro del contorno de la cavidad propuesta (figs. 8b y 8c). <P>Esta t&eacute;cnica tiene de com&uacute;n con las de otros autores que el acceso cameral tiene forma triangular, pero difiere fundamentalmente en el punto quir&uacute;rgico inicial. <P>Este punto se corresponde en todos los molares en profundidad con el cuerno mesiovestibular, m&aacute;s prominente y constante anat&oacute;micamente, lo que garantiza la localizaci&oacute;n del conducto de m&aacute;s dificultad. <P>Asegura la eliminaci&oacute;n en bloque del techo simult&aacute;neamente con la localizaci&oacute;n del resto de los conductos, favorece una mejor orientaci&oacute;n y en gran medida previene la perforaci&oacute;n del piso de la c&aacute;mara pulpar. <P>Se logra un acceso cameral m&aacute;s peque&ntilde;o y r&aacute;pido, m&aacute;s mesializado, como es la c&aacute;mara pulpar, se cumplen los objetivos de retirada de la pulpa coronaria, la localizaci&oacute;n de los conductos y la entrada libre del instrumental endod&oacute;ntico en &eacute;stos. <H4> AGRADECIMIENTOS</H4> <I>Al Dr. </I>Tom&aacute;s Alem&aacute;n Echeverr&iacute;a<I> por su asesor&iacute;a en la confecci&oacute;n de este trabajo y a los Sres. </I>Jos&eacute; Canales<I> e </I>Ismael Alem&aacute;n Echeverr&iacute;a <I>por la valiosa ayuda en la confecci&oacute;n de los gr&aacute;ficos.</I> <H4> SUMMARY</H4> A cavity access and canal location technique is presented in this paper. It uses a fixed bench mark for all the molars from which the tegmen of the pulpar cavity is removed while canals are located. In this way, we guarantee a faster 100 % scanning of mesiovestibular canals, even in difficult molars, by a personnel with low level of training. <P>Subject headings: MOLAR; DENTITION, DERMANENT; TOOTH ATTRITION <H4> REFERENCIAS BIBLIOGR&Aacute;FICAS</H4> <OL> <!-- ref --><LI> Araujo MJ. Anatom&iacute;a de la cavidad pulpar. Rev Bras Odontol 1967;25:338-68.</LI> <LI> Besner E, Ferrigno P. Endodoncia pr&aacute;ctica. Gu&iacute;a cl&iacute;nica. M&eacute;xico DF:El Manual Moderno,1985:94-9.</LI> <!-- ref --><LI> Ingle J. Endodontics. Philadelphia:Lea Febiger,1975:154-60.</LI> <LI> Leonardo MR, Leal JM, Sim&oacute;es Filho AP. Endodoncia. Tratamiento de los conductos radiculares. La Habana;1986:172-4 (Ed. Revolucionaria).</LI> <LI> Noboru I, Zualo ML. Procedimientos cl&iacute;nicos en endodoncia. R&iacute;o de Janeiro:Pancast,1988:78,90.</LI> <LI> Grossman L. Pr&aacute;ctica endod&oacute;ntica. La Habana;1971:203-4 (Ed. Revolucionaria).</LI> <!-- ref --><LI> Dowson J, Garber F. Endodoncia cl&iacute;nica. M&eacute;xico:Interamericana,1970:67-9.</LI> <LI> Sommer RF, Ostrander FD, Crowley MC. Clinical endodontics. A manual of scientific endodontics, 3ra ed. Philadelphia: Saunders,1966:48-50.</LI> <LI> Pucci F, Conde R. Conductos radiculares. Casa Barreiros y Ramos, Uruguay, 1945;vol2:315-31.</LI> <!-- ref --><LI> Maisto OA. Endodoncia. Buenos Aires: Editorial Mundial,1967:120-1.</LI> <!-- ref --><LI> &Aacute;lvarez Valls L. Endodoncia. La Habana;1977:77,85 (Ed. Revolucionaria).</LI> <!-- ref --><LI> Soler R, Shocron ML. Endodoncia. Rosario: La M&eacute;dica C&oacute;rdova:1957:202.</LI> <LI> Tob&oacute;n G, V&eacute;lez Restrepo FH. Endodoncia simplificada. La Habana;1985:88-91 (Ed. Revolucionaria).</LI> <LI> Cohen S, Burns R. Endodoncia. Los caminos de la pulpa. La Habana;1985:101-7 (Ed. Revolucionaria).</LI> <!-- ref --><LI> Lasala A. Endodoncia. 2da ed. Caracas: Cromotip,1971:282.</LI> <LI> Kuttler Y. Fundamentos de endometa-endodoncia pr&aacute;ctica. 2ed. M&eacute;xico DF:M&eacute;ndez Oteo,1980:234.</LI> <!-- ref --><LI> Bence R. Handbook of clinical endodontic. Saint Louis: CV Mosly,1976:132-60.</LI> <LI> Kuttler Y. Endodoncia pr&aacute;ctica. 1ra. ed. M&eacute;xico:A.L.P.H.A. 1961:171-3.</LI> <LI> Pomeranz HH, Fishelberg G. The secondary mesiobucal canal of maxilary. J Am Dent Assoc 1974;88:119-24.</LI> <LI> Skidmore AE, Bjorndal AM. Root canal morphology of the human mandibular first molar. Oral Surg 1971;32(5):778-84.</LI> </OL> Recibido: 4 de noviembre de 1999. Aprobado: 19 de noviembre de 1999. <BR>Dra. <I>Rosal&iacute;a Echeverr&iacute;a Elissalt.</I> Facultad de Estomatolog&iacute;a. Ave. Salvador Allende y calle G, Ciudad de La Habana, Cuba. <P><A NAME="x"></A><SUP>1</SUP> Profesora Titular. Doctora en Ciencias M&eacute;dicas. <BR><SUP>2</SUP> Profesora Auxiliar. <BR><SUP>3</SUP> Profesora Asistente. <BR><SUP>4</SUP> Profesor Titular. Especialista de I Grado en Cirug&iacute;a Maxilofacial. <BR><SUP>5</SUP> Profesora Titular. <DIR> <DIR>&nbsp; <BR> &nbsp; </DIR> </DIR>

References

  • Araujo, MJ
      Anatomía de la cavidad pulpar Rev Bras Odontol 1967 25 338-68
  • Besner, E
    Ferrigno, P
      Endodoncia práctica: Guía clínica 1985 94-9México DF El Manual Moderno
  • Ingle, J
      Endodontics 1975 154-60Philadelphia Lea Febiger
  • Leonardo, MR
    Leal, JM
    Simóes Filho, AP
      Endodoncia.: Tratamiento de los conductos radiculares. 1986 172-4La Habana;
  • Noboru, I
    Zualo, ML
      Procedimientos clínicos en endodoncia 1988 78,90Río de Janeiro Pancast
  • Grossman, L
      Práctica endodóntica 1971 203-4La Habana; Ed. Revolucionaria
  • Dowson, J
    Garber, F
      Endodoncia clínica 1970 67-9México Interamericana
  • Sommer, RF
    Ostrander, FD
    Crowley, MC.
      Clinical endodontics.: A manual of scientific endodontics 1966 3ra ed. 48-50.Philadelphia Saunders
  • Pucci, F
    Conde, R
      Conductos radiculares 1945 315-31Uruguay Casa Barreiros y Ramos,
  • Maisto, OA
      Endodoncia 1967 120-1Buenos Aires Editorial Mundial
  • Álvarez Valls, L
      Endodoncia 1977 77,85La Habana Ed. Revolucionaria
  • Soler, R
    Shocron, L
      Endodoncia 1957 202Córdova:
  • Tobón, G,
    Vélez Restrepo, FH.
      Endodoncia simplificada. 1985 88-91La Habana Ed. Revolucionaria
  • Cohen, S
    Burns, R
      Endodoncia: Los caminos de la pulpa 1985 101-7La Habana Ed. Revolucionaria
  • Lasala, A
      Endodoncia 1971 2da ed. 282Caracas Cromotip
  • Kuttler, Y
      Fundamentos de endometa-endodoncia práctica 1980 2ed. 234México DF Méndez Oteo
  • Bence, R
      Handbook of clinical endodontic 1976 132-60Saint Louis CV Mosly
  • Kuttler, Y
      Endodoncia práctica 1961 1ra. ed. 171-3México A.L.P.H.A.
  • Pomeranz, HH
    Fishelberg, G
      The secondary mesiobucal canal of maxilary J Am Dent Assoc 1974 88 119-24
  • Skidmore, AE
    Bjorndal, AM
      Root canal morphology of the human mandibular first molar Oral Surg 1971 32 5 5 778-84
History: